Hoy en clase hemos estado hablando sobre que el fútbol y la política tienen
mucho que ver, principalmente quiero hablar sobre el FC Barcelona y Cataluña,
ya que también estamos viendo la guerra de sucesión. El FC Barcelona es un
equipo de fútbol especialmente unido a la política independentista de Cataluña.
El fundador del FC Barcelona, Hans Gamper, quiso tener una entidad abierta a todo el mundo
sin tener en cuenta la procedencia de las personas. Se imaginó un club en el
que todo el mundo pudiera dar su opinión, y apostó por una sociedad
democrática, regida libremente por sus asociados. No dudó en dar al FC Barcelona
un sentido que lo marcaría universalmente: el compromiso con la catalanidad.
Catalanidad, democracia, polideportividad y universalidad: a partir de las
premisas de Gamper hoy todo tiene un sentido cuando hablamos del Barsa. El FC
Barcelona es “más que un club” en Cataluña, porque es la institución deportiva
más representativa y uno de los mejores embajadores de Cataluña.
Los colores de la camiseta de los jugadores del FC Barcelona siempre han
sido azul y grana, la mitad de la camiseta era azul y la otra mitad era grana,
con las mangas del color contrario y los pantalones blancos. Una de las teorías
para explicar los orígenes de los
colores azul y grana es que Gamper adoptó los mismos colores del Basilea, donde
había jugado antes de venir a Cataluña. En 2012/13 Sandro Rosell decidió que la
segunda equipación del Barcelona llevara la Senyera, eso formó mucha polémica,
ya que mucha gente dio por hecho que todos los culés estaban a favor de la
independencia y la gente empezó a confundir el término culé con catalán.
Yo como culé que soy, me molesta que la gente me incluya dentro de los independentistas
y catalanes solo por ser de este equipo, ya que yo no he nacido, ni vivido en
Cataluña para que me califiquen como tales. Con esto también quiero decir que
no siempre se puede mezclar el fútbol con la política porque como ya he dicho
antes, yo por ser del barsa no tengo porque apoyar la independencia ni nada de
eso.
Fútbol y política no son lo mismo, no mezclemos las churras con las merinas
Lorena Benito Madrigal.
la entrada está bien, aunque hay una imagen que no se ve. La etiqueta independencia no tiene sentido, con Cataluña basta.
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